Si no reconoces la silueta de este pueblo, significa que todavía no has tocado el cielo de la Alpujarra. Y, permíteme la recomendación, deberías hacerlo.
Capileira es uno de los pueblos más altos de España. Está ubicado a 1436 metros de altitud en la falda sur de Sierra Nevada. Es el más alto de los tres pueblos del valle del Poqueira, uno de esos enclaves que atraen al viajero por muchas razones.
Son pueblos que conservan el legado andalusí de las casas blancas, azoteas rasas y grandes pendientes que los hacen parecer en un equilibrio precario constante. Muchos han sido, y siguen siendo, los viajeros románticos, autores y artistas que han pasado por estos rincones. Y muchos de ellos han encontrado aquí un lugar de inspiración y acogimiento. Los hay que buscan un remanso de paz entre montañas, pueblecitos blancos y valles llenos de manantiales. Otros van a la caza de las musas. Entre esos nombres ilustres están Pedro Antonio de Alarcón, Gustavo Doré, Antonio Maura, Gerard Brenan, Federico García Lorca, Manuel de Falla o Chris Stewart, además de ilustres miembros de la realeza y la aristocracia europea.
La Alpujarra es un extenso valle de más de 70 kilómetros lleno de arroyos, prados, bosques, senderos y pueblos blancos. Se sitúa en la falda sur de Sierra Nevada, a caballo entre las provincias de Granada y Almería. Su nombre proviene del árabe al-bugscharra, que significa “tierra de pastos”.
A este lugar hay que venir sin prisa, porque no tiene que haberla. El ritmo de la vida es diferente al de cualquier otro sitio. Pero son muchas las actividades que se pueden hacer, casi todas ellas en la naturaleza.
Lo primero, y más importante, es ubicarte. A la entrada de Pampaneira, el primer pueblo del valle, encontrarás una zona de aparcamiento a mano izquierda. Ahí puedes dejar el coche un rato para asomarte y admirar la cuenca del río Poqueira, con sus tres pueblos a diferentes alturas. Es una primera panorámica de la zona que te hará respirar hondo física y emocionalmente. Una vez pasas Pampaneira, a un kilómetro y medio, te encuentras a la izquierda con el desvío que te lleva a la parte alta del valle y a los pueblos de Bubión y Capileira. Antes de ponerte a hacer actividades de cualquier tipo, déjate llevar por los pies y piérdete por las calles y los rincones de estos pueblos, merece la pena. A partir de ahí, el plan lo decides tú mismo, aunque ahí van algunas recomendaciones.
Una visita muy dulce: Hay una fábrica de chocolates en el pueblo de Pitres (a 10 min en coche desde Pampaneira) que es indispensable visitar y que se llama “Chocolates Sierra Nevada”. Es chiquitita, pero hacen verdaderas maravillas con el chocolate. Son muy amables y te explican todo el proceso artesanal para crear las decenas de variedades que allí tienen y comercializan. Para endulzar la faena, en el centro del local tienen una gran mesa llena de cuencos con cachitos de cada una de sus especialidades, que puedes probar allí mismo. Seguro que te llevarás muuuuuchas cosas de allí, para ti o para regalar. También tienen una pequeña sucursal en Pampaneira. Puedes saber más de ellos haciendo clic aquí.
Un poco más allá, en Pórtugos (a 2 km), justo pasado el pueblo, se encuentra la ermita de Las Angustias, junto a la que discurre un manantial al que llaman la “Fuente agria”. Junto al aparcamiento, se baja por una escalera que te lleva a un arroyo, encajonado entre las rocas, cuyas aguas lo tiznan todo de colores ocres, consecuencia de sus aguas ferruginosas. Es un lugar lleno de naturaleza y extraordinariamente fresco en cualquier época del año..
Hay muchos senderos en el barranco del Poqueira, pero os recomiendo el que baja desde Capileira hasta el río (el camino de las eras), muy sencillo y para toda la familia. También podéis hacer un recorrido entre los tres pueblos del valle por los senderos que discurren entre ellos. Y si os sentís con ganas de hacer una gran ruta, también se puede subir desde aquí al pico Mulhacén (3.479 m), la cumbre más alta de la península. En tal caso, es necesario hacer noche en el refugio de Poqueira (a 4h) y también es aconsejable ir en coche desde Capileira hasta La Cebadilla y dejarlo allí. Si estáis interesados, tenéis todos los detalles de esta ruta en Wikiloc (ver aquí).
Meditación de altura. Pocos saben que en este valle se ubica un centro de meditación budista en el que muchas personas se retiran durante varias jornadas para cambiar el chip de sus vidas. Se trata del centro O Sel Ling, un lugar donde no solo son bien recibidos los budistas, sino cualquier persona que requiera una cura del alma, un retiro en tranquilidad o un reencuentro consigo mismo. Puedes encontrar más información haciendo clic aquí.
Más allá (o más acá, según se mire) de la meditación, en estos tres pueblos hay muchas personas que, en efecto, se han retirado de la vida ajetreada y se han refugiado para vivir a otro ritmo. Muchos de ellos, así como gente del lugar, han puesto en marcha negocios de artesanía, arte, academias de baile flamenco o telares que se pueden visitar. También organizan talleres y actividades a las que el visitante se puede apuntar.
Los tres pueblos del valle del Poqueira (Pampaneira, Bubión y Capileira) merecen una visita tranquila la cual, seguro, estarás recordando durante mucho tiempo.
Para comer, la verdad es que hay muchos lugares donde se puede hacer con calidad y a un precio muy atractivo. Sin embargo, me voy a permitir recomendaros tres sitios. En Capileira es imprescindible “La trastienda de la monja”, donde el tomate aliñado y las tablas de embutidos adquieren otra dimensión. En el mismo pueblo tenéis que probar el pucherito de garbanzos con hinojo de “El corral del castaño”, que es para saltarse las lágrimas, aunque, eso sí, en el mes de agosto no conviene abusar. La última recomendación es el magnífico “Restaurante Teide”, ubicado en Bubión, donde todo pasa por la pierna de cordero al estilo alpujarreño. Y después… a andar un buen rato para bajar la comida.
Para dormir hay una oferta muy amplia, desde hoteles hasta casas rurales con mucho encanto. A partir de los años ochenta la oferta de alojamiento no ha hecho sino crecer y mejorar en calidad en toda esta zona. Capileira es pueblo con mayor número y diversidad de alojamientos y encontraréis para todos los gustos. En caso de que no queráis dedicar un rato a buscar, os recomiendo directamente la Villa Turística de Bubión (ver aquí), con una magnífica relación calidad/precio y que está a pocos minutos de cualquier punto del valle.
Para llegar a Capileira el punto de referencia es Lanjarón, la entrada natural de la Alpujarra viniendo desde Granada (por la A-44). Tras 7 kilómetros en dirección a Órgiva, pero justo antes de entrar, veremos a la izquierda una estación de servicio, y tras ella la carretera A-4132 que inicia la ascensión. Tras unos 15 kilómetros, se llega a Pampaneira. Poco más adelante, a la izquierda, está el desvío de la A-4129, que nos llevará directamente hasta Capileira, a unos 4 kilómetros.
Hay muchos libros sobre las alpujarras, porque son muchos los autores que se enamoran de esta tierra. Os voy a mencionar cuatro de ellos:
El primero es un clásico: «La Alpujarra: Sesenta leguas a caballo precedidas de seis en diligencia», de Pedro Antonio de Alarcón, que ocupa un lugar privilegiado en la historia de la literatura viajera escrita en castellano. Hace una descripción profunda de la vida en Sierra Nevada, sus gentes, tradiciones, costumbres y legado. Escribió varios libros de viajes sobre esta zona.
Otra referencia literaria es «Al sur de Granada», del hispanista británico Gerard Brenan, quien vivió seis años en esta zona y documentó detalladamente a las gentes, sus usos y costumbres.
No quiero dejar de mencionar «Entre limones», un libro escrito por Chris Stewart, ex-guitarrista del grupo Génesis, que encontró en este paisaje su lugar en el mundo. Posteriormente escribió otros tres libros también centrados en sus experiencias en las alpujarras.
Ya escribí hace tiempo un post sobre mis viajes a Capileira cuando era estudiante, que puedes leer aquí. También puedes conocer otros destinos en nuestro singular cuaderno de viaje, ver aquí.